En esta nueva entrada del Blog, te voy a contar cómo estos 5 hábitos negativos te impiden hacer crecer tu negocio.
Los hábitos negativos repetidos con frecuencia están limitando tu potencial, el crecimiento de tu negocio y de tu éxito empresarial.
Son 5 hábitos destructivos y que deberías eliminar inmediatamente de tu vida.
Y ahora vamos a hablar de cómo actúa cada uno de estos hábitos en tu contra y cómo puedes darle la vuelta a la situación para conseguir el éxito en tu vida y en tu negocio.
Quejarse
Quejarse no sirve de nada y es una de las mayores pérdidas de tiempo porque en vez de pensar en la solución a un problema, te centras en el problema y lo mucho que te perjudica.
¿Sabías que quedarse puede provocar efectos negativos en tu mente y en tu cuerpo?
En una entrevista en Stanford News, el neurocientífico Robert Sapolsky explicaba que la acumulación de estrés en el día a día por factores que no ponen en riesgo tu vida hace que se libere adrenalina innecesariamente junto a otras hormonas del estrés, y como consecuencia con el paso del tiempo, puede causar problemas graves de salud.
El estudio que realizó Sapolsky demuestra que las hormonas del estrés causan atrofia del hicocampo, la parte del cerebro asociada principalmente con la memoria a largo plazo.
¿Cómo te sentirías sabiendo que quejándote frecuentemente estás literalmente dañando una parte de tu cerebro?
En realidad, quejarse es una vía de escape para no tomar responsabilidades, para justificar que no estás haciendo nada, y además programar tu mente para el fracaso. Crea la falsa ilusión de que has hecho algo.
En vez de eso, intenta invertir tu energía en mejorar tu situación. Cuando encuentras formas de ser productivo y te mantienes optimista, estás demostrando que tienes el control de tu vida.
Observa a las personas que se pasan la vida quejándose por todo. Se centran en el pasado y ponen toda su atención en eso. En cambio, las personas con mentalidad ganadora se centran en hacer que las cosas sucedan, y canalizar toda su energía en encontrar soluciones a los retos.
Como empresario, parte de tu trabajo es solucionar problemas. Puedes quedarte y solucionar absolutamente nada, o puedes reemplazar toda esa negatividad con posibles soluciones y actuar en consecuencia.
Desarrolla el hábito de liderar en vez de hacerte la víctima.
Y hablando sobre esto, el siguiente mal hábito es…
Resignarse
La vida del empresario es una montaña rusa constante. Es fácil resignarse cuando te encuentras en un mal momento después de una época de bonanza.
Sin embargo, cuánto más reflexiones y pienses sobre tus fracasos, más calará en ti ese estado de desmotivación que podría generar que te dieras por vencido en vez de luchar por tus objetivos.
Cualquier empresario que se la juegue, va a sufrir contratiempos en algún momento. Puede que hayas estado arruinado, hayas creado negocios que han fracasado estrepitosamente y hayas invertido miles de euros e infinitas horas en proyectos que han sido un completo desastre.
Pero si consigues no estar demasiado tiempo dándole vueltas a estos contratiempos, te resultará mucho más fácil volver a la carga con más fuerza e intentarlo de nuevo.
En el momento en el que te encuentres en esta situación, permítete sentirte mal durante unos días si es lo que te ayuda, pero por muy difícil que sea, empieza a pensar en el próximo paso.
Crea una lista de acciones que te ayuden a ir hacia el siguiente objetivo.
Envidia
Cuando sientes envidia por el éxito de los demás, es fácil pensar que esas personas se lo han encontrado todo hecho, en vez de pensar que también se lo han tenido que currar.
Si consideras que la gente exitosa tan solo son personas que han tenido suerte en la vida, ¿qué tipo de mensaje le estás dando a tu subconsciente? ¿Cómo vas a ser persistente si en lo más profundo de ti piensas que el éxito empresarial es solo cuestión de suerte o privilegios que tienen unos cuantos afortunados?
Tu subconsciente te va a boicotear si menosprecias los logros de otras personas.
En vez de eso, cada vez que conozcas el éxito que está teniendo otra persona, tómatelo como una prueba de que tú también puedes conseguirlo. Mejor aún, empieza a rodearte de esta clase de personas y aprende todo lo que puedas de ellos.
Mentalidad de escasez
Mentalidad de escasez es pensar que el éxito es un juego de suma cero. Si te haces con una mayor parte del pastel, habrá menos para los demás.
Esto puede servir para los pasteles, pero no se aplica al éxito.
Compartir tu conocimiento con otros no te hace menos inteligente.
Y si te conviertes en un empresario exitoso, no significa que otra persona tenga que arruinarse para que tú lo consigas.
Por otro lado, la mentalidad ganadora es totalmente al contrario. Es pensar que siempre hay más y se puede crear más, y por supuesto, puedes crear sinergias con otras personas en vez de competir contra ellas y beneficiar a ambas partes.
Una de las cosas que más llaman la atención de las personas con éxito es que alcanzan sus objetivos sin arrebatárselos al resto. Encuentran formas de aumentar el tamaño del pastel para que todos se puedan beneficiar.
Tú también puedes disfrutar de este efecto si te centras en ofrecer valor y compartir con los demás en vez de quedarte con todo para ti.
Darse por vencido demasiado pronto (y a menudo)
Refuerzas lo que más repites en tu día a día. Si tienes el hábito de darte por vencido a las primeras de cambio, tendrás dificultad a la hora de prosperar.
Si pierdes el entusiasmo rápido cuando estás aprendiendo algo nuevo, ¿qué va a pasar cuando empieces un nuevo negocio o quieras probar una nueva idea?
Si te das por vencido en el momento en que te encuentras el primer obstáculo, estás entrenando a tu mente a abandonar cuando las cosas se ponen difíciles.
Las personas optimistas trabajan durante más tiempo en aquellas cosas que consideran importantes.
Los pesimistas gastan su tiempo y energía en cosas sin importancia.
Desarrolla una mejor actitud pensando que puedes enfrentarte a tus obstáculos y vas a ser capaz lo que sea necesario para salir de esa situación complicada.
Aprende actividades que requieran paciencia, habilidades complejas, o ponte en situación donde tengas que solucionar problemas.
Espero que este artículo te ayude a identificar y ser más consciente de los hábitos que estás desarrollando en tu día a día.
Si quieres recibir más consejos y estar informado de todo lo que comparto, puedes descargar el Ebook “De 0 a 100: Cómo los emprendedores de éxito crean negocios rentables desde cero” al suscribirte a mi lista de correo.
A través de mis emails comparto consejos con el objetivo de inspirarte para mejorar los resultados de tu negocio.
Si quieres ampliar más información, puedes echarle un vistazo a este artículo.
Tus acciones de hoy, los resultados de mañana.
Fran Rodríguez
