En este artículo te voy a hablar sobre lo que hay detrás del estrés, irritación, frustración y lo que realmente significa.
Puede que esto sea un poco difícil para empezar el día pero creo que algo bueno por donde empezar y que todos los emprendedores nos deberíamos plantear de vez en cuando.
En este punto en el que me encuentro, donde he trabajando como consultor con decenas de clientes durante los últimos quince años, puedo decirte que nunca, absolutamente nunca me he encontrado con alguien que se sienta estresado o frustrado cuando siente pasión por lo que hace.
Piensa un momento en esto.
Piensa en eso que haces que te motiva, lo que hace que te levantes cada mañana con ilusión, lo único que está por encima de cualquier otra cosa, eso que sabes que si haces, permite que tu negocio vaya hacia delante y que si dejas de hacer, frena el crecimiento…
Cuando estás haciendo eso, ¿te sientes estresado o cansado?
¿Te sientes frustrado? ¿Irritado?
Ahora mismo, me apasiona todo lo que estoy haciendo en mi negocio, la mentoría con clientes y todo lo que estoy preparando para el Club de Líderes.
Y cuando hago esto, no me cuesta trabajo hacerlo. Da igual que sea a primera hora de la mañana, última hora de la tarde o fines de semana.
A ver, no me malinterpretes. No es igual que estar en el sofá viendo una serie. Lo que quiero decir es que lo hago a gusto.
Porque es lo que me gusta hacer y me apasiona, y entonces durante ese momento, todo lo que tengo que hacer deja de ser “trabajo”.
Pero todos tenemos esos días en los que llegamos a la oficina, nos sentamos en el escritorio y notamos el peso de todas esas tareas sobre nuestros hombros y nos hace sentirnos totalmente frustrados. Es entonces cuando nos metemos en ese laberinto donde somos muy duros con nosotros mismos y nos decimos todo lo que no hemos hecho y tendríamos que haber hecho…
Esto es algo a lo que no solemos prestar mucha atención, el diálogo interno. Cómo nos hablamos a nosotros mismos.
Si te paras un momento, seguramente nunca hablaríamos a nadie de la manera en la que nos hablamos a nosotros mismos.
Piénsalo.
Tan importante como cuidar el lenguaje que utilizamos para motivar a nuestro equipo o el que empleamos con compañeros o amigos, es el lenguaje con el que nos hablamos y pensamos.
Frases como “tendría que haber hecho”, “debería hacer”, “tengo que…” son vampiros de energía, que lo único que hacen es agotarnos mentalmente.
Hay una razón por la que estás procrastinando, y no es porque seas un vago. Porque te garantizo que si es algo que te gusta hacer realmente, algo por lo que sientes pasión de verdad, nunca lo dejarías para más tarde.
¿Me equivoco?
Las únicas cosas que dejamos para más adelante, que nos frustran o irritan, son cosas que no deberíamos estar haciendo.
Si este es tu caso, entonces es momento de hacerte las siguientes preguntas:
¿Qué debería estar haciendo? ¿Es eso lo que quiero para mi vida?
A veces nos da pánico hacernos esta pregunta. Nos pone en una situación de vulnerabilidad, de vacío, donde nos damos cuenta de verdad si lo que estamos haciendo vale la pena o simplemente lo hacemos porque lo hemos hecho tanto tiempo que ya nos encontramos cómodos.
En ocasiones es normal no saber muy bien hacia donde ir.
¿Alguna vez te has sentido así?
Seguro que si.
Por eso me gustaría hablarte de algo que creo que te podría ayudar a salir de ese laberinto en el que te encuentras.
Me gustaría hablarte de un sencillo ejercicio que puedes hacer. Es un ejercicio que he hecho anteriormente y me ha ayudado bastante tanto a mí como a clientes a pensar con mayor claridad, por eso quiero compartirlo contigo.
Muy bien.
Vamos a ver con perspectiva todas las tareas que estás haciendo ahora mismo en tu negocio.
Primero, identifica las tareas que haces que te resultan sencillas, que te gustan hacer y que no te llevan casi esfuerzo.
Esas tareas donde fluyes.
Bien.
Ahora es momento de identificar las otras tareas, las que están ahí en medio, llenando la agenda, que no sabes con certeza si tendrías que seguir haciendo o no, y tampoco sabes con seguridad si esas tareas son clave en tus resultados y crecimiento de tu negocio.
¿Me sigues?
De acuerdo. Este es el ejercicio que puedes empezar a hacer para identificar este tipo de tareas.
No te preocupes, tan sólo te va a llevar 5 minutos al día, pero tienes que hacerlo a mitad del día, no esperes a la noche.
Haz este ejercicio como mejor te venga, en una libreta (si eres de los clásicos), en el móvil o en el ordenador, el medio no importa.
Esto es lo que quiero que hagas durante la siguiente semana.
Simplemente escribe una lista de todas las cosas que haces durante el día.
Si estás haciendo investigación, estudio de la competencia, si haces publicidad en Facebook, estás escribiendo un post del Blog, consultorías con clientes…
Cada tarea que hagas, tienes que anotarla en algún sitio.
Todos los días durante una semana. Esto es realmente importante, no intentes saltarte ningún día porque te estarías engañando a ti mismo.
Si haces este ejercicio, verás los resultados.
Anota todo lo que haces durante el día.
Y ahora, al final de la semana, es momento de analizar todas esas tareas y separar las que son prioritarias y vitales para el crecimiento y buen funcionamiento de tu negocio, y las que no.
Verás como hay cosas que te hacen perder el tiempo, gastar energía y que no están sumando.
Justo en este momento, es cuando vas a poder identificar todo esto con claridad.
En base a tus resultados, tendrás que tomar decisiones.
Y si no sabes por dónde empezar, échale un vistazo a todo lo que estoy preparando en el Club de Líderes para emprendedores altamente motivados y que quieren ser los dueños de su destino.
En este Club comparto todas las estrategias, técnicas, consejos y todo lo que he aprendido durante mi trayectoria como Consultor con emprendedores comprometidos a sacar su máximo potencial.
No sé si has estado ya en programas parecidos, en ese caso, presta atención a lo que te voy a decir.
Esto que vas a encontrar aquí no se parece en nada a cualquier otro programa. Yo también he invertido mucho tiempo y dinero en formación que no me ha servido para nada. Eso es exactamente lo que no quiero que pase aquí.
En este Club vas a poder encontrar siempre herramientas que sean útiles y prácticas en tu día a día como emprendedor. Y para ello voy a compartir todo lo que sé, que he puesto en práctica con clientes y que ha funcionado (con buenos resultados) contigo, para que tú también lo puedas utilizar a tu favor.
Si crees que esto podría ser para ti, puedes acceder en este enlace.
Tus acciones de hoy, los resultados de mañana.
Fran Rodríguez
