Antes de empezar vamos a definir qué es esto de los benchmark.
Los benchmark o puntos de referencia, se utilizan en los negocios como técnica para medir el rendimiento de un sistema.
Específicamente para medir su capacidad generando resultados. Al evaluar todos los componentes de la misma manera, es la mejor forma de compararlos entre sí.
Dicho esto, ¿cómo podemos determinar cuáles son los puntos de referencia clave para medir el éxito?
Si miras a tu alrededor, el punto de referencia que se utiliza para medir el éxito suele ser, casi siempre, el dinero.
Y le sigue la cantidad de fama.
Pero nuestros puntos de referencia están condicionados a lo que vemos en internet o lo que se publica en las clásicas revistas sobre negocios.
Y déjame decirte, que a menudo, todo lo que vemos y leemos en estas fuentes, nos suele alejar del camino que nos propusimos en un primer momento.
Es normal, porque cuando estamos confundidos, somos más propensos a que nos confundan.
De todas formas, aquí te voy a dar algunos puntos de referencia que te ayudarán a tener más claro los benchmarks que necesitas tener en cuenta que para acercarte al éxito.
Puede que incluso te ayude a conseguirlo a ti también.
Empezamos.
Normalmente, cuando iniciamos nuestra aventura como emprendedores, pensamos en cómo será nuestra vida cuando lleguemos a tener tantos ingresos y nos imaginamos lo bien que nos irá cuando ese momento llegue.
El primer objetivo es conseguir unos ingresos que cubran nuestros gastos.
¿Pero estás preparado para vivir lo que pasa cuando las ganancias sobrepasan lo que tenías pensado?
El primer pensamiento que te viene a la cabeza es: ¿Cómo voy a poder alcanzar esa cifra de nuevo?
Lo segundo que te viene a la mente es: ¿La volveré a alcanzar alguna vez?
Lo que quiero decir con esto es que a veces, los emprendedores, pecamos de ingenuos.
Especialmente cuando intentamos resumirlo todo a los ingresos.
Pero es lo que vemos, ¿no?
Fíjate en todas las revistas, blogs, artículos sobre emprendimiento, donde parece que lo único que importa son los ingresos.
Pero la realidad es diferente.
Cuando consigues sobrepasar el límite que te habías puesto para llevar una vida “tranquila”, llega el momento de sentarse y poner sobre la balanza otras cosas.
Y esas cosas que solemos poner en la balanza suelen ser:
-
Más tiempo libre
-
Dinero que te permita tener más tiempo libre
-
Hacer lo que de verdad te gusta
Vamos a empezar hablando del tiempo libre.
Los emprendedores que están todo el tiempo ocupados, no suelen ser tan productivos.
Al menos, es eso lo que me parece.
No creo que ser productivo tenga relación con las horas que se trabajan.
Por ejemplo, conozco algunos dueños de negocios que se toman 3 meses de vacaciones al año y tienen negocios que van como un cohete.
Esto podría parecer una barbaridad para muchos, lo de los tres meses de vacaciones.
Pero ellos, han decidido darle la vuelta a la situación.
En vez de vivir absorbidos por su negocio, prefieren adaptar el negocio a su estilo de vida.
Así que lo que hacen a principio de año es decidir cuándo van a poder cogerse esas tan deseadas vacaciones.
Por supuesto no suelen ser tres meses seguidos. Suelen ser entre 10 y 12 semanas repartidas durante el año.
Pero la idea principal aquí es que uno de estos benchmarks importantes para estos emprendedores, es el tiempo libre.
Porque esa es la manera en la que determinan cuando están siendo eficientes y cuando no.
Una de las razones por las que mucha gente se mete en el mundo de los negocios, es para tener mayor control sobre sus vidas.
Y si estamos siempre trabajando… no parece que tengamos mucho control, ¿no es así?
Además, estos descansos hacen mucho más que resetear las pilas.
Por ejemplo, en nuestro día a día, tenemos una cantidad bastante grande de responsabilidades.
Ya no solo en el trabajo, también en casa.
Cuando te tomas esas vacaciones, todas esas responsabilidades pasan a ser de otra persona.
Nuestro cerebro no solo recibe un cambio de escenario, también deja de pensar y planear lo que hay que hacer en todo momento.
Por eso son tan importantes los descansos.
A mis clientes les recomiendo siempre que dejen un día libre a la semana sin hacer nada.
Está claro que todos tenemos situaciones y responsabilidades diferentes.
Así que en vez de pensar primero en el dinero, es mejor pensar en términos de tiempo.
Ese debería ser el primer benchmark a tener en cuenta.
Ahora vamos a hablar del tema del dinero.
Cuando hablamos de dinero, nos encontramos estos tres perfiles de personas:
El primer perfil es aquel que no tiene dinero y piensa en él todo el tiempo.
El segundo perfil es aquella persona que tiene suficiente dinero y está conforme con su situación.
El tercer perfil es aquella persona que tiene muchísimo dinero, tiene mucho éxito, y no deja de pensar en el dinero.
¿A qué deberíamos aspirar como emprendedores?
Al segundo grupo.
Si el dinero es un problema para ti, obviamente, estarás pensando en el dinero todo el tiempo.
Pero si ya tienes suficiente, empezarás a tener otras prioridades.
¿Pero cuánto es suficiente?
Eso es algo que tendrás que descubrir por ti mismo.
A muchos de nosotros nos gustaría aprender a hacer algo nuevo. Retomar algún hobby.
Quizás aún no es el momento de tener tanto tiempo.
Pero una buena idea sería planear cuando te gustaría que fuese el momento.
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Tus acciones de hoy, los resultados de mañana.
Fran Rodríguez
